Una y otra vez.
Porque te gusta. Porque no quieres otro.
Porque aún recuerdas cuando llegó a tus manos.
Porque aún significa algo para ti y no quieres desprenderte del recuerdo. Porque, ¿para qué otro? Es ése y punto, ¿no?
Porque te encaja, lo quieres. Y, sí, hasta le hablas.
Porque está bien, aún funciona y le tienes cariño.  

Porque no se trata de tener todo reciclado. Se trata de aprovechar al máximo lo que tenemos y, si, necesitamos algo más o reponer lo nuestro, la pregunta será ¿cuál es la mejor opción? ¿Vale la pena que sea nuevo o será mejor algo reciclado que pueda solucionar lo que necesito?  

Y no se trata solo de ropa. Si no de todo. Al final, vestimos como pensamos y pensamos que las cosas se pueden hacer mejor.  

Hasta hace unos años, era algo atípico regalar un móvil usado para un cumpleaños o ropa vintage o algún objeto upcycling… Pero ¿a que de pequeñ@ era normal eso de heredar lo del mayor o lo de l@s prim@s? A veces, parece que al hacernos adultos nos da como cierta vergüenza recibir lo de otros. Sin embargo es lo mejor que podemos hacer. Por nosotr@s, por los demás y, si quieres pensarlo a lo grande, por el plantea.  

Que esto del reciclado y darle más vida a las cosas, en realidad, no es nada nuevo. ¿Por qué para algunas cosas sí, pero para otras no? 

Por ejemplo, los ¡coches de segunda mano! ¡Hay un sin fin de puestos de trabajo que se generan alrededor de ellos! Desde talleres mecánicos, hasta los propios concesionarios.
Y los apaños hogareños también. Que el manitas de las casa siempre ha sido bien valorado por todos en la familia.  

Está bien reparar, está bien sentir orgullo de saber valerte por ti mism@ aprendiendo a arreglar lo que tienes. Y si no te sientes habilidos@, hay mucha gente que ha encontrado en la reparación de objetos y prendas la solución a su situación laboral.  

Las múltiples vidas en un planeta de recursos limitados  

¿Qué pasa cuando usas y reusas? Que no hay que producirlo de nuevo. Así que tampoco se usan nuevos recursos, de esos que escasean. Con lo cual ayudas a que no se agoten. Así de simple.  

Uso y reuso, del planeta no abuso  

Lo producido, ya está. Ya impactó, ya se extrajo… así que mejor que lo aprovechemos bien, hagamos que valga la pena eso que ya existe.  

Es decir, el planeta tiene unos recursos limitados, unos que se han ido generando a lo largo de millones de años, Sin embargo, en el último tiempo la producción desmesurada de bienes, han ido agotando lo que teníamos. Y aunque todo nos suene lejano, un día, no habrá suficiente materia prima para seguir como hasta ahora… Pero, ¿ahora estamos bien?  

Pues en realidad estamos consumiendo por encima de nuestras posibilidades y las del planeta. La obsolescencia de algunos bienes tampoco ha ayudado a mejorar la situación. De alguna manera, un buen día las cosas dejan de funcionar. 

Más producción innecesaria genera residuos que están ahí y hay que hacer algo con ellos antes de que contaminen más.  

Y de nada vale echar culpas, porque tod@s —de alguna manera— hemos contribuido a que esto sea así. Pero también somos responsables de frenar la situación.  

Por eso, en Koopera hacemos mucho más que generar empleo y darle una segunda vida a la ropa. También contamos con un equipo que está especializado en la Reutilización de Aparatos Eléctricos y Electrodomésticos.  

Ell@s se  encargan de recuperar todos esos aparatos que ya no se usan, aquellos que quedaron obsoletos o necesitan reparación. De esos que por mucho que les tengas cariño, están cogiendo un polvo en algún lugar de la casa u oficina porque ya no funcionan.  

Así que en Koopera, además de dar trabajo a cientos de personas, hacemos  que otras muchas puedan acceder a electrodomésticos en muy buen estado revisados y reparados. Esos aparatos que, en su primera vida, ayudaron a unos hogares, también sirven para enseñar un oficio y dar trabajo a muchas personas, antes de ser útiles en su nuevo hogar. ¡De esto se trata esto de usar y reusar! (POST)

Así que es posible que nuestra cara más visible sean nuestros contenedores donde recogemos ropa que se clasifica y se prepara para la venta en nuestros Koopera Store. Aunque, otras, esas que ya no están en buen estado para que alguien las use, forman parte del proceso de reciclaje textil. Así es como nacen esos paneles aislantes para la construcción, esas moquetas de coches y los hilos para nuevas prendas. Incluso, las prendas donadas más inspiradoras, pueden ser parte de nuestros talleres de Upcycling ( POST )O ser parte del decorado de nuestras oficinas.( Post )

O las transformamos en energía que nos ayuda a lograr residuo 0.  

Uso y reuso, del planeta no abuso  

Por eso, está bien eso de usar lo que tengas hasta que se gaste del todo, hasta que ya no puedas repararlo, hasta que deje de cumplir su función, hasta que decidas que puede serle más útil a alguien más. 

Hasta que te quede pequeño o demasiado grande, hasta que deje hacerte ilusión, hasta que decidas que mejor, con otra persona. Y ahí, es cuando estamos nosotros para darle otra vida. Una y otra vez.